El Día de San Valentín, se celebra el 14 de febrero en todo el mundo. Un día donde se resalta la importancia del amor en cualquiera de sus vertientes. Algunos consideran que es una fiesta más con origen comercial pero realmente viene de muchos siglos antes. Concretamente del siglo III en Roma; Valentín, era un sacerdote sentenciado a muerte por celebrar en secreto matrimonios de jóvenes enamorados.
San Valentín puede ser el día más especial del año, pero también se puede convertir en un dolor de cabeza para quienes no tienen idea de cómo sorprender a esa persona especial. Celebrar esta fecha es posible sin tener que hacer regalos materiales, ni preocuparse por el envoltorio o la tarjeta con dedicatoria.
Una buena opción es regalar momentos que se pueden compartir en pareja, amigos o familia y que guardamos como un buen recuerdo.
Para acertar con un momento tan importante, en The Nice Affair te damos las claves para organizar una cena inolvidable en casa.
Lo primero, tendrás que decidir si preparas una cena con los invitados sentados, o una cena en plan buffet. Si la cena es sentada, bastará con adaptar la mesa al número de invitados. En caso de que sea cena tipo buffet, tendrás que rediseñar el espacio de tu salón para adaptarlos a la situación y número de personas.
El siguiente paso, es pensar el menú. A la hora de elaborarlo, piensa en las intolerancias, en las alergias, y por supuesto, en esos platos o ingredientes que les gusta a tus invitados: una buena anfitriona siempre sabe lo que más les gusta a sus invitados. Eso será una señal de que has preparado la cena pensando en él o ellos y contribuirá de forma decisiva a que la velada sea todo un éxito.
Una vez que tenemos pensado el menú, es el momento de pensar en el resto de los elementos: ¿Cómo decoramos la mesa? Elige una mantelería y cubertería que sean especiales y adecuados para la estación del año, coloca un bonito centro de mesa con flores y algunas velas. Apuesta por la sencillez, recuerda la fórmula “menos es más”: siempre funciona.
Otro elemento muy importante a tener en cuenta es la música. Mas relajada al principio, y no demasiada alta para permitir una conversación cómoda. A la hora de las copas puede ser con más ritmo y un poco más alta.
Por último, si quieres que el momento sea aún más especial puedes dejar mensajes escritos personalizados o alguna sorpresa individual para cada uno de tus invitados.